Novak nació de una necesidad real y una pasión familiar: el voleibol. La inspiración fue nuestro hijo, Sebastián. Al verlo esforzarse en la cancha, entendimos que su dedicación merecía el mejor equipamiento para voleibol posible, ya que sus frustraciones a menudo provenían de material que no estaba a la altura de su potencial.
Nos sumergimos en el mundo del equipo de voleibol profesional. Esa búsqueda personal para encontrar equipamiento desportivo innovador que le brindara a Sebastián la confianza para superar sus límites, es hoy nuestra empresa. Novak no es solo una tienda; es la solución que creamos para él y que ahora compartimos con todos los jóvenes deportistas que sueñan con dar lo mejor de sí en cada partido.